Luego del taller sobre la Misión Continental, se celebró este 06 de junio con mucho fervor la Eucaristía y posteriormente la procesión con el Santísimo Sacramento del Altar por la plaza Altagracia de la ciudad de Barquisimeto, acudiendo al llamado que por varios días hicieran, fray Rafael Arroyo, franciscano capuchino y los hermanos de la Orden Franciscana Seglar, para celebrar solemnemente el día del Cuerpo y la Sangre del Señor.
Muchos fieles se dieron cita para acompañar a Jesús Eucaristía, entre ellos los hermanos del Camino Neocatecumenal, los cursillistas y los organizadores los hermanos franciscanos seglares.
Recordo en su homilia fray Rafael Arrooyo, las invitaciones que en repetidos momentos hiciera el Papa Juan Pablo II y el Papa Benedicto XVI de celebrar la fiesta del Corpus Christi, realizando la procesión por las calles, "Amadísimos hermanos y hermanas, revivimos esta estupenda realidad en la actual solemnidad del Corpus Christi, en la que la Iglesia no sólo celebra la Eucaristía, sino que también la lleva solemnemente en procesión, anunciando públicamente que el Sacrificio de Cristo es para la salvación del mundo entero".

"Jesús, alimento espiritual que fortalece la esperanza de los creyentes, nos sostiene en este itinerario hacia el cielo y refuerza nuestra comunión con la Iglesia celestial". Juan Pablo II.

Fue realmente emotivo ver salir al Santísimo de nuestra parroquia y recorrer nuestros alrededores, mientras los niños de la Nifra, niños franciscanos lanzaban flores, momento que sirvió para pedir por nuestro país, por la familia venezolana y por toda la Iglesia y las dificultades actuales. Que el Señor derrame abundantes bendiciones y que cada día sea amada la Sagrada Eucaristía, fortaleza de nuestras almas.
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